Fotografiando el Eclipse

Con lo fácil que es hoy en día documentarse de muchas cosas, siempre y cuando se le dedique el tiempo suficiente para buscar por las redes. Este tipo de fotografía ya está más que chupada… o ¿no?. 

Me considero una fotógrafa bastante versátil, supongo que cuando uno se preguntas tantas cosas como un investigador acaba probando muchas cosas. Así que hoy quiero hablaros del tipo de fotografía que movió a una verdadera oleada de fotógrafos que se movilizan para hacer este tipo de fotografía el pasado viernes noche.

Era un momento poco habitual y por eso todo el mundo, de un modo u otro quiso ver el eclipse, ese eclipse que los más expertos consideraban de los más largos que había habido en bastante tiempo. Duraría entre una hora y media a dos horas (según la fuente este tiempo cambia), cuando lo normal es que no dure más allá de media hora. Llegados a este punto, menos mal que duró tanto, porque la verdad es que las nubes nos la jugaron a muchos de los fotógrafos pendientes de la foto. Las nubes y la calima hicieron de las suyas y la luna no pareció en el deseado horizonte roja y majestuosa. Sin embargo, sí lo hizo más tarde, ya alta pero aún roja.

Estas fotografías para los más aficionados se las preparan con tiempo. Buscan el lugar idóneo, la vista, la trayectoria que va a tomar la luna, el tipo de toma exacta que quieren o el conjunto de tomas… Son toda una serie de cosas que parecen poca cosa pero que al final requiere de pericia y práctica.

Planificación

Actualmente mucha más gente puede acceder a este tipo de foto, no sólo por los equipos fotográficos sino también por las herramientas que se pueden usar para planificar la fotografía. Aunque cada vez se necesitan menos web para planificar la foto, como Meteoblue o Yr.

Pero lo que realmente se usa ahora son las aplicaciones de móvil, como Photopills o Planit!. Ninguna de las dos aplicaciones es gratuita, requieren del pago de una licencia de 10,99€.

Photopills incluye multitud de opciones: planificación del sol, y luna, hiperfocales, profundidad de campo, manual en castellano, mareas y un “modo dron”… Pero no a todo el mundo le gusta, por ejemplo, Planit! pese a no tener un manual en castellano a muchos fotógrafos le gusta por la opción “Viso (VR)” que te da una idea de cómo se va a ver la foto, aunque hay que introducir los esbozos de edificios que te vas a encontrar:

Uses la aplicación que uses, es recomendable ir algún día antes del día “X” para asegurarte de que la fotografía es posible. Piensa que tu planificación puede no contar con que la toma requiera entrar en una propiedad privada, por ejemplo. Además, ver por dónde sale y cómo sale la luna es una buena forma de practicar para el día en cuestión.

Aunque lo intento, no me considero buena planificadora de este tipo de fotografías, así que siempre puedes visitar el blog de otros compañeros fotógrafos que planifican más, como mi compañero Sergio Pinilla. Pero sí quiero dejarte esta web Time and date, que te muestra el movimiento y posición de la luna en los próximos eclipses.

Toma de la foto

Lo bueno de este tipo de fotografía es que normalmente no se hace sólo, puesto que la fotografía nocturna especialmente no es adecuado hacerla ni sólo ni con muchos compañeros. No hacerla sólo por si te pasa algo y tampoco con mucha gente porque acabamos con mil linternas y puede acabar colándose más de una linterna en la toma.

El punto más importante es encontrar un lugar donde hacer la foto. En mi caso fue en Alcazar de San Juan (Castilla la Mancha).

Otra de las recomendaciones que se suelen hacer, es no tirar la foto con una focal menor de 300mm, aun así siempre está la opción de usar anillos duplicadores, pero tener en cuenta siempre la pérdida de calidad y de luminosidad. Si tu cámara es APS-C al tener el factor de multiplicación 1.5 en Nikon, Fuji, Sony, etc…y 1.6 en Canon, esto hace que una focal 200mm con el factor 1,5 de Nikon por ejemplo, tendrá en realidad una focal 300mm que podríamos decir que es el mínimo recomendado. Personalmente con un 300mm para mi gusto se queda pequeña.

Así que ya sabes cuanta más distancia focal mayor se verá la luna, pero claro, los teleobjetivos de estas características, los de fauna y deporte, tienen unos precios desorbitantes. Si quieres ver lo grande que se puede ver, aquí tienes una foto de Fusky con una focal 600mm y un multiplicador.

Un trípode, indispensable para evitar trepidaciones. Aunque a veces si hay mucho viento y dependiendo del tamaño de tu objetivo las trepidaciones se hacen algo difíciles de evitar.

Otro factor en la configuración de la cámara es levantar el espejo, eso nos obligará a dar dos clicks con cada foto. Un click de subida del espejo y otro de toma de foto con el que baja de nuevo el espejo. Esto evita la trepidación también y en mi cámara aparece en el dial de modo de disparo como “MUP”.

Un disparador remoto también facilita mucho la toma. Si no tienes, puedes hacer las fotos con el temporizador de la propia cámara. De igual modo se trata de evitar las posibles vibraciones que pudiéramos crear a la hora de apretar el botón. Pero el temporizador además te servir para cronometrar mejor el tiempo entre toma y toma:

Otro de los inconvenientes es la nitidez de la toma. Tienes dos opciones o sabes calcular tu hiperfocal, dependiente de tu cámara y focal, o lo haces a ojo. Pero a ojo necesitas enfocar un objeto a suficiente distancia. Además, el momento de la foto influyen en la nitidez. Si el eclipse o luna llena aparece próxima al tramonto será más fácil enfocar el paisaje y la luna.

Y la toma en sí, puede que por lo alta que salga la luna no esté cerca de nuestro objeto con el que queremos componer. Así que existe la opción de hacer una doble exposición. Además, tener en cuenta cuánto de cerca debemos estar de nuestra composición fotográfica, por ejemplo, de la luna y un edificio, nos ayuda a encuadrar. Aquí la focal no tiene nada que ver, todo depende de lo cerca que estés del objeto, cuanto más cerca estés del objeto más cerca lo verás y esa proporción objeto-luna se verá modificada.

En la toma de la foto se aconsejan diafragmas abiertos e ISOS altos para que la velocidad de la toma sea lo más rápida posible. Pero a medida que la luna sale del eclipse empieza a tomar el brillo habitual, y eso cambia las condiciones de la toma. A medida que hagas las fotos debes cambiar la sensibilidad o reducir el tiempo para evitar que la luna salga quemada.

En cualquier caso, disfrutar de la fotografía y de vuestro desarrollo en este tipo de fotos.

Comentarme cualquier cosilla al fin y al cabo la información que cada uno aporta es un poco más de sabiduría 😉